martes, 18 de enero de 2011

“Djinn: La favorita”, de Jean Dufaux y Ana Miralles.

Con nueve álbumes publicados en España por Norma Editorial –y un décimo publicado aparecido en Francia- “Djinn” es una de esas series europeas consolidadas que siempre agrada releer y que vamos a ir repasando a lo largo de una nueva serie de entradas.

Con “La Favorita” se inicia el primer ciclo de la serie en el que asistimos a como la bella Kim Nelson se encuentra en Turquía, adonde ha acudido atraída por la figura de su abuela, la exótica y sensual Jade quién fuera en las primeras décadas del siglo pasado la favorita de Murati, el llamado Sultán Negro. Mientras investiga en la misteriosa y exótica ciudad de Estambul, Kim acabará convertida a su pesar en la pieza clave para descubrir el tesoro perdido de Murati en un juego de conspiraciones que la conectan directamente con la figura de su abuela con la que parece compartir una singular conexión y en la que está en juego su propia vida.

Si algo ha caracterizado a Jean Dufaux a lo largo de su exitosa carrera es haber tenido muy buen ojo a la hora de elegir a los dibujantes con quién ha colaborado en sus series. Marini, Delaby o la misma Ana Miralles son excelentes dibujantes que se han sabido amoldarse a la perfección a la capacidad de Dufaux para armar historias de género que a pesar de su escasa originalidad y el sobreabuso de lugares comunes y tópicos reconocibles por cualquier lector con un mínimo bagaje resultan sumamente efectivas en su objetivo principal que es ofrecer un buen rato de entretenimiento y permitir el lucimiento de sus compañeros a los lápices.

En ese sentido, “La Favorita” no es una excepción y Dufaux plantea con un excelente dominio del oficio una historia aventuras cargada de erotismo y misterio, localizada en Estambul en la que la narración avanza a través del relato paralelo y complementario de las andanzas de las dos protagonistas separadas en el tiempo, Kim y Jade, de personalidades aparentemente contrapuestas. Si la primera es, en principio, la típica turista ingenua y timorata desubicada por el choque cultural con las costumbres turcas, Jade se muestra como una femme fatale de armas tomar que utiliza de toda su sensualidad para conspirar a favor de los intereses de su amo, el Sultán Negro, e imponer su propia autoridad dentro del harén de este. En esta primera entrega, Dufaux plantea la trama y presenta a los personajes ofreciendo lo suficiente como para atrapar a los lectores con un sabio manejo de la dosificación de la intriga que hábilmente sabe promete rmás de lo que ofrece.

Dufaux no se ruboriza en plantear situaciones y personajes estereotipados que evocan desde novelas como “La pasión turca” de Antonio Gala a películas como “El Hamman”de Ferzam Ozpetek, que Dufaux condimenta con buenas dosis de intriga y erotismo coqueteando abiertamente con el softcore a lo Enmanuelle Arsan. A pesar de su falta de originalidad, si el álbum –y la serie- merecen la pena más allá del oficio de Dufaux es por el gran trabajo de la española Ana Miralles, que quizás no fue profeta en su tierra a pesar de venir avisando con obras como “Eva Medusa” y adquirió pronto el reconocimiento que en España no encontró en Francia con esta serie. A pesar que en este primer álbum, Miralles se encuentra todavía adaptándose a la temática se muestra como una buena narradora y sabe explotar y mostrar todo el exotismo de la historia tanto en localizaciones como en personajes que en definitiva son los puntos fuertes de la misma al tiempo que poco a poco va mostrando una evolución que será más evidente en las sucesivas entregas de la serie.

En definitiva, “La Favorita” es un buen punto de partida de una serie que por o, a pesar de, sus asumidas referencias puede atraer a un amplio abanico de lectores que sabrán sucumbir a alguno de sus muchos encantos. Pronto una nueva entrega.