jueves, 8 de julio de 2010

“Snake: Por un puñado de dólares”, de Enrique Sánchez Abulí y Jordi Bérnet.

La sociedad creativa que en su momento formaron Abulí y Bérnet ha sido una de las de mayor calidad que ha dado el cómic patrio, siendo su obra más representativa y conocida la magnífica “Torpedo 1936”, pero fruto de esta colaboración surgieron otras series quizás menos conocidas pero igualmente interesantes como “Snake: Por un puñado de dólares”, editado hace ya unos añitos por Norma Editorial en su Colección BN.

Snake: Por un puñado de dólares” es una recopilación de seis historias cortas protagonizadas por Snake, un vaquero jugador, mujeriego, borracho, marrullero y vagabundo que rompe con todos los tópicos de la figura del pistolero.

Snake: Por un puñado de dólares” se ha etiquetado como un “trabajo menor” dentro de la notable obra de Abulí y Bérnet resultando evidente que es un intento de transponer las claves del éxito de “Torpedo” a un género que ambos autores conocen a la perfección, el Western en una selección de aventuras exageradas y paródicas, cargadas de sexo y mala baba, que funcionan gracias al indiscutible talento de unos autores en estado de gracia. Sánchez Abulí nos ofrece una visión esperpéntica del vaquero vagabundo que resulta original y novedosa respecto a los clichés habituales resaltando sus elementos más negativos, ya que Snake lejos de ser un romántico caballero andante es un antihéroe en toda regla, un vividor de dudosa moral, capaz de hacer cualquier cosa incluso traicionar a un amigo, por conseguir sus objetivos que no van más allá de liarse con la chica de turno o no pagar las rondas de un bar o las apuestas en el juego. Lejos del justiciero taciturno y solitario, Snake es un pendenciero machista, hablador y chulesco que permite a Abulí dar rienda suelta a su portentosa capacidad para engarzar rápidos, vitriólicos e irónicos diálogos – en el cómic patrio no hay un guionista que construya los diálogos mejor que este hombre- con constantes juegos de palabras que logran sacar una sonrisa en el lector por mucho que ya se conozca el chiste.

Pero es que, además, la comicidad de Sánchez Abulí se ve potenciada por el magistral trabajo de un Bérnet que quizás se encontraba en su mejor momento, con un dominio espectacular de la narración y la composición que despliega, además, todo su talento para la composición del gag cómico sin renunciar a su característico blanco y negro personal, exagerándolo en ocasiones para reforzar el tono humorístico del tebeo. A pesar de la clásica composición de páginas y la incorporación de bocadillos y onomatópeyas en prácticamente todas las viñetas, sin que, en ningún momento, parezcan recargadas las páginas y añadiendo en algunas de las historias como Doble Pareja –ojo a los jugadores de cartas- chistes paralelos que avanzan al mismo tiempo que el que sirve de argumento a la historia.

En definitiva, “Snake: por un puñado de dólares” más que una obra menor es una obra menos conocida de unos autores imprescindibles en el cómic nacional pero no por ello exenta de calidad.

Otros cómics de Sánchez Abulí en El lector impaciente:

-“Alex Mágnum”.

Otros cómics de Jordí Bérnet en El lector impaciente:

- “Jonah Hex: Orígenes”.