martes, 22 de junio de 2010

“Notas al pie de Gaza”, de Joe Sacco.




Hoy he terminado “Notas al pie de Gaza”, la última obra de Joe Sacco publicada en un correcto y grueso volumen por Mondadori, que sin duda será considerada como uno de los “tebeos del año” por lo tristemente actual de la realidad tratada más allá de sus hallazgos narrativos, pero tras su finalización, no he podido dejar de preguntarme si –intentando distanciarme de su dramático contenido – es un cómic tan bueno como se predica. Os comento mis conclusiones.
El maltés Joe Sacco abrió un nuevo género en el lenguaje del cómic –la crónica periodística- a través de reportajes mediante viñetas que le han permitido desarrollar una rica y premiada carrera reporteril en la que durante meses debe sumergirse en los lugares donde se desarrollan sus crónicas jugándose en ocasiones lla vida. Dejando atrás sus obras iniciales (“Apuntes de un Derrotista”) Sacco ha cubierto conflictos “in situ” como la Guerra de los Balcanes (“Gorazde:Zona Protegida”, “El Mediador” o “El Final de la Guerra”) o el judeopalestino en obras como “Palestina: en la Franja de Gaza” o esta “Notas a pie de Gaza”, quizás su obra narrativamente más ambiciosa y compleja dando una perspectiva diferente al tratamiento de la información del habitual en otros medios basados en imágenes más inmediatos y tratando de dar un enfoque humano al tiempo que informativo.

Joe Sacco es consciente que su trabajo carece de la inmediatez que requiere el trabajo periodístico tradicional ya que aparte de pasar largas temporadas en los territorios donde se desarrollan sus crónicas recopilando testimonios debe posteriormente pasar bastante meses dibujando con lo que los sucesos que relata no pueden ir ligados a la esclavitud de la actualidad informativa. Esta dificultad de su labor, el autor la compensa añadiendo a su trabajo una nota más reflexiva e incorporando apuntes costumbristas de la vida en las zonas en las que se mueve, pequeñas intrahistorias humanas y cotidianas que suelen perderse en la voracidad e inmediatez que otros medios reclaman y que Sacco se preocupa en reforzar para ir más allá de la mera información periodística y coquetear con el periodismo de investigación "novelizado" a la manera de clásicos como Dominique Lapierre o Ryszard Kapúscinski o directamente con la investigación histórica. En Notas a pie de Gaza”, Sacco va más allá y astutamente no sólo incorpora ese elemento de cotidianidad a su crónica hasta un punto mayor del desarrollado en obras anteriores sino que además convierte en el centro de su investigación una serie de matanzas ocurridas en la franja de Gaza en el lejano 1956 con lo que la obra se asegura un anclaje histórico que haga mantener su vigencia intacta a lo largo del tiempo más allá de los vaivenes que pudieran producirse en la explosiva relación judeopalestina.

Sacco organiza la obra en distintos capítulos de desigual extensión para acercarse a los hechos tratados desde distintos lapsos temporales en una narración paralela–el pasado lejano que ilustran los fragmentados relatos de los testigos de los hechos y el pasado “cercano” (que es el presente del autor en la obra) y que permite a Sacco tratar la realidad diaria del pueblo palestino utilizando como hilo conductor del relato su propia experiencia en la búsqueda de la información a pie de campo junto a sus colaboradores, logrando con este paralelismo acercar al lector de un modo único el complejo mosaico de misería inconmovible en que se encuentra sumida la población de la olvidada Franja de Gaza a lo largo de las décadas y las generaciones. Sacco sabiamente dosifica la información para no apabullar al lector sin por ello restarle dramatismo a la crónica de los distintos testigos que relatan los hechos al tiempo que nos colamos en las penalidades de su día a día y conocemos de primera mano la esencia de su trabajo al convertirse el autor en un personaje más de la historia al que acompañamos enfrentando y contrastando en múltiples ocasiones los testimonios de uno y otros con la propia información documental disponible –el libro se completa con un amplio dossier final- y siendo testigos de sus intentos para no ceñirse exclusivamente a la versión de una sola de las partes aun cuando el mismo Sacco en un gesto de honradez declare su ausencia de objetividad aun cuando intente mantener un distanciamiento profesional en la investigación de los hechos y la presentación de los personajes.
Más allá de lo interesante del contenido de la historia, en el aspecto formal no encuentro enormes novedades en la obra de Sacco respecto a obras anteriores sino la línea continuista de un autor maduro con un estilo plenamente asentado y definido que ha sintetizado al máximo las enseñanzas de los autores norteamericanos que toma como referencia –Crumb y Spiegelman en primer término con la presencia al fondo de los dos Will, Elder y Eisner- para pulir el desarrollo narrativo de sus historias al máximo y aprovechar toda la fuerza y el detallismo de sus dibujos para reflejar ambientes y localizaciones reduciendo en la medida de lo posible las cartelas explicativas e incluso a los cuadros de diálogo que el autor va distribuyendo en las páginas con mucha inteligencia sin obviar la explotación de recursos específicos que ya habían aparecido anteriormente en su obra con igual fortuna como la reiteración de viñetas o el uso de splash pages.

En definitiva, “Notas al pie de Gaza” es un cómic que evidentemente impactará y dará mucho que hablar a aquellos que por primera vez lean una obra de Sacco que descubrirán las potencialidades insospechadas de un medio todavía virgen en muchos aspectos y servirá a sus seguidores para reencontrarse con un autor fiel a sí mismo y al compromiso con su trabajo siendo un eslabón más en una ya de por sí brillante carrera.